Otra forma de generar viento es ponerse a girar sobre el propio eje.
Si sujeto un cartón de unos treinta centímetros de largo en cada mano, dos tapas de caja de zapatillas, por ejemplo, extiendo los brazos y me pongo a girar como un trompo, genero un viento no despreciable.
Hay que tener aguante, eso sí.
Hay que animarse a caer mareado al suelo, reponerse, levantarse, y volver a girar.
No se hasta qué punto esto me sirve.
Insopeeeeeeeeeeeeeckckckckckckcqqqtooooorrr Maaaeaaarrttiaiainuuauauchchchcchi
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